Pereza, procrastinación y estrés

Cuando la pereza me domina

Cuando estamos muy estresados podemos  llegar a estados de agotamiento que contribuyen a dejarnos llevar por la pereza.

Nuestra prestigiosa colaboradora Bárbara Tovar nos cuenta en EFE: Salud cómo se genera la pereza y qué motivos la mantienen. También nos ofrece una serie de consejos para controlarla:

• Funcionar por objetivos, no por estados emocionales.
• Fijar metas alcanzables que nos ayuden a tener éxito a largo plazo. “Esos pequeños objetivos servirán para ganar confianza y romper la teoría del fracaso previo”.
• Establecer momentos y plazos. “Hay que buscar un espacio del día para poder hacer aquello que nos cuesta hacer”.
• Buscar apoyo social. Compartir nuestra actividad con otra persona o comprometerse con alguien que tenga una actitud activa “puede ser una forma de motivarnos”.

En este link tienes acceso a la entrevista completa de la Agencia EFE: http://www.efesalud.com/noticias/cuando-la-pereza-me-domina/

Dejando para mañana…                                                                         

En otras ocasiones, el estrés o la ansiedad frente a una tarea pendiente que nos parece difícil, incómoda o aburrida, nos lleva a posponerla hasta agotar su plazo límite. A esta forma de actuar se la conoce como procrastinación. Aunque no es propiamente un hábito de pereza, comparte con este una serie de elementos comunes. En cualquier caso “dejar para mañana lo que puedes hacer hoy” a menudo nos hace entrar en un círculo que incrementa nuestra ansiedad y niveles de estrés.

La procrastinación a menudo está causada por un exceso de perfeccionismo o por temor a fracasar (‘parálisis por análisis’). Probablemente esté relacionada con hábitos adquiridos en entornos en los que se valora la ‘ejecución en plazo’ (el esfuerzo se da en el último momento) y no se refuerza el progreso continuo. Afortunadamente parece ser que en el ámbito educativo se ha pasado del ‘día del examen’ en exclusiva, a la evaluación continuada del progreso.

Todos los consejos para controlar la pereza citados por Bárbara son también válidos para combatir la procrastinación, me permito añadir unos pocos más:

• Reconocer y conocernos: En primer lugar, es importante que sepamos reconocer en qué tipo de tareas y obligaciones procrastinamos y valoremos qué motivos nos llevan a dejar de hacerlas.
• Ser realistas con nuestra estimación del tiempo que destinamos a cada cosa.
• Aprender técnicas para gestionar el tiempo, priorizando las tareas en función de su importancia y no sólo de su urgencia.
• Evitar distracciones (en especial, de correos y redes sociales, quitando avisadores y dedicando momentos concretos para revisar y contestar estas comunicaciones).
• Identificar los mejores momentos del día y lugares para hacer cada tipo de actividad.

José Francisco Martínez-Losa y Bárbara Tovar

Director de Escuela Acestrés y Directora de la Clínica Bárbara Tovar